ENSAYO
Declaración
Universal Sobre la Diversidad Cultural
La Declaración Universal de la UNESCO sobre la
Diversidad Cultural, fue firmada en
parís el 2 de noviembre del 2001, luego
de ciertas catástrofes que se produjeron en Septiembre del mismo año. Esta
Declaración, más que un documento, es la reafirmación de la Declaración de los
Derechos Humanos, así como otros instrumentos jurídicos universalmente
registrados; tales como los pactos internacionales de 1966 donde uno menciona
los derechos civiles y políticos y el otro se refiere a los derechos
económicos, sociales y culturales.
El visar este documento, permitió presentar el
dialogo intercultural, como la mejor garantía de paz entre las culturas. La
declaración aspira a salvaguardar esa joya vital y renovable, que es la
Diversidad Cultural; se percibe como un proceso que asegura la supervivencia
humana, así como el recelo a toda incitación segregacionista y fundamentalista
que en nombre de las diferencias culturales consagre esas mismas diferencias,
contradiciendo el mensaje de la Declaración Universal De Los Derechos Humanos.
La Psicología Diferencial se enfoca en explorar la
cantidad de diferencias existentes en las conductas de los seres humanos, ya
sea diferenciando entre grupos ó los cambios conductuales a lo largo de su vida; es decir, las variabilidades. Por medio de estas variabilidades (interindividuales, intergrupales e
intraindividuales) se permite analizar a fondo al ser humano así también,
cómo los estímulos ambientales influyen
en éstos; dentro de esto se permite mencionar el reduccionismo, podemos
percibir que funciona como mecanismo
para poder analizar de manera
profunda y objetiva la diversidad cultural, lograr ahondar en el estudio de los individuos
de cada cultura y cómo los rasgos culturales influyen en cada persona.
La psicología de las diferencias individuales al
englobar las ya dichas variabilidades, es una disciplina que trata sobre la
diversidad e individualidad del ser humano; la diversidad conduce a un trato
diferente pero no desigual; un ejemplo de esto es al saludar a un Japonés, por
su cultura éstos tienden a no mostrar gran muestra de afecto en público; un Dominicano
es todo lo contrario, pero estas distinciones en los rasgos de sus
comportamientos no deben ser motivo de rechazo hacia uno o el otro, el respeto y la aceptación de estas
normas conductuales influenciadas por la cultura, son en demasía necesarios
para mantener un equilibrio, paz y tolerancia hacia los demás.
La fuente de individualidad humana no es sólo una
variación genética, también es una variación psicológica y cultural.
La cultura es el atributo más distintivo de la
humanidad y hace posible que el ser humano no sólo se adapte a las exigencias
del ambiente como el resto de los organismos, sino que además se adapte cambiando
dicho ambiente, de acuerdo con sus necesidades.
El término raza en particular me resulta despótico;
según las lecturas esto se expresa como una subdivisión de las especies
biológicas formadas a partir de particularidades que se transmiten mediante los
genes y muestran consistencia fenotípica, aunque no implica una pureza biotípica por los cruces y
mezclas evolutivas; y esto es lo que diferencia a algunos individuos de otros.
Las investigaciones en el área de psicología objetaron con desmontes
científicos los mitos discriminatorios de ideologías que tacharon a
determinadas razas de ‘’superiores e
inferiores’’, ya que esto solo
repercute a la intolerancia y no convivencia armoniosa entre individuos de
distintas culturas.
Resulta grato poder conocer sobre éstos temas y
darnos cuenta como en nuestra realidad todo se ve manifestado. En la Declaración Universal de la UNESCO sobre
la Diversidad Cultural, se descubren varios artículos; entre éstos están El
artículo II que habla de Diversidad
Cultural al Pluralismo Cultural, se refiere a la interacción e integración
armoniosa en la convivencia de personas de distintas culturas; por ejemplo, en
las escuelas o colegios donde se producen intercambios culturales, (o niños de
otras culturas inscritos en las mismas) donde se rinde una adaptación y
convivencia agradable entre éstos; grupos religiosos promueven ésta interacción
armoniosa y de aceptación sin importar de dónde provenga el individuo.
En el apartado Diversidad
Cultural y Derechos Humanos, encontramos que promueve una nueva
característica: los derechos culturales,
donde un individuo tiene derecho a desarrollarse en la cultura que desee, sobre
todo en aquella de la que es autóctono; por ejemplo un Haitiano o Chino, que
reside o haya nacido en nuestro país, tiene derecho a poseer sus espacios de desarrollo y
manifestación cultural.
En la otra sección encontramos la Diversidad Cultural y Creatividad, donde se manifiesta que se
deben generar espacios para transmitir los saberes culturales a las nuevas
generaciones, para que se produzca una interacción dentro de ella y la
enriquezcan; un ejemplo sería hacer mención de el Barrio Chino que se encuentra
en la capital de nuestro país, donde cada año se realizan exhibiciones
culturales, donde se muestra la cultura China de manera más pública; su folklor
y otras expresiones artísticas.
Los temas de Diversidad Cultural deben ser de
importancia dentro de la educación. En los centros de enseñanza es fundamental
que se aborden estos argumentos, así
cada generación podrá percibir el mundo como un lugar para todos, sin distinción de color o etnia; con profunda
tolerancia y aceptación del otro, respetando los orígenes de cada uno; que si
nos sentamos a reflexionar en lo pretérito, es el mismo.